En España, en la década de 1950, había un pueblo llamado Malencia de Álima situado al norte de la Región de Murcia. Sus valores eran los cristianos, la tradición y la cultura… Pero, bajo esa capa de pureza, se escondía el fango de infidelidades, drogas y asesinatos del que se alimentaba todo el pueblo. El franquismo hizo todo lo posible por ocultar todo lo que sucedió en Malencia de Álima. Pero las atrocidades que pasaron en aquel pueblo sobrevivieron durante años al olvido gracias a sus supervivientes. Ahora, una historia que nunca tuvo que ser olvidada es contada, como son contadas las historias en los pueblos: una única historia vista por muchos ojos y en cada mirada una historia diferente. A través de las personas que sufrieron la enfermedad del alma que llevaba Malencia de Álima, vemos el dolor de intentar ser quien no se es de verdad, dando paso al mundo impío en el que se vivía entonces y en el que vivimos ahora.