XI Premio Anaya de Literatura Infantil y Juvenil, 2014 Premio Fundación Cuatrogatos, 2015 Una novela que ayuda a entender el mundo al tiempo que se crece, y habla de la importancia de la lectura. Virginia vive en el campo con su familia, rodeada de animales y plantas. La convivencia con la perra Laika, la rana Renee, el hurón Hugo o el pájaro Grip es tan natural como con cualquiera de sus hermanos. Los animales parecen ser un miembro más de la familia. Pero ese verano, Virginia descubre algo muy especial: una cabaña en un árbol en la que van apareciendo libros de forma misteriosa. ¿Quien los deja ahí? ¿Por que?