¿Qué tiene Tánger? Se preguntaba Mick Jagger al regresar de una estancia en las entrañas de la ciudad imantada para atraer a artistas. Quizá sea porque posa altiva como una vedette en la puerta de África -como decía Perre Lotti- o, tal vez, que produce hermosos vértigos -como apuntara Saint-Exupéry-. Lo cierto es que al calor de su cosmopolitismo y de su estatus de ciudad libre, numerosos escritores de todas las partes del globo han sentido la fascinación por fijar su residencia en ella... o ser aves de paso: Barthes, Beckett, Burroughs, Bowles, Capote, Genet, Ginsberg, Goytisolo, Kessel, Morand, Gertrude Stein, Tennessee Williams, Yourcenar. Pero hay una vinculación con España que no todos recuerdan: hasta la primera mitad del siglo XX, fue prácticamente una ciudad española en sus costumbres, sus fiestas, sus modos de convivencia... y su idioma, sobre todo. En esa Puerta de África, el español se convirtió en una lengua materna más y consiguió que hoy día podamos referirnos a la ciudad como de un ineludible enclave literario en castellano. En estas páginas se rastrea ese Tánger escrito, descrito y representado en español, en un tiempo en el que arribar en la ciudad debía parecerse a atracar en un puerto donde empezar de cero. Párrafo a párrafo, veremos desfilar a escritores como Carmen Laforet, Ramón ...
