Como Valeria, muchas mujeres no saben que son bailarinas; en algún momento perdieron sus puntas y, sin ellas, se convencen de que ya no pueden bailar. Jorge Ruiz, alma máter de Maldita Nerea, nos invita, en su primera incursión literaria, a que las recuperemos y así nos conozcamos de verdad. Valeria, una mujer aparentemente normal, no encuentra su sitio. Se entretiene, llega tarde y no sabe explicarse ni cómo ni por qué en algún punto del camino dejó de entender lo que le pasaba. Solo quiere ser feliz, pero no lo consigue, ni teniendo todo a su favor. Valeria no conoce aún a Bailarina. Esta es la historia de su encuentro y del cambio radical que se producirá en su vida: Bailarina le enseñará a escucharse, a conocerse y a quererse. ------- Yo conozco bien a las bailarinas, y sé cómo encontrarlas. Soy todo un experto en eso. Se esconden detrás de muchas, muchas cosas, incluidas las tazas de café, las estampidas y los disfraces. Pero hay algo a lo que no pueden resistirse y rara vez lo hacen: el chocolate. Tienen una gran fuerza de voluntad para todo lo demás, hasta para mover el mundo, pero no para rechazar el chocolate. Es siempre su punto débil. Así que, si quieres que bailen para ti, no las obligues, ni les grites, ni les metas miedo. Hábl...
